Apostando al poder transformador del arte, Casa Rafael promueve la resiliencia en chicos en situación de riesgo psicosocial mediante el estímulo de su creatividad en diversas disciplinas artísticas en base a la pedagogía de la “educación por el arte”, combinada con un acompañamiento psicológico y social inspirado en la “pedagogía de la presencia.
Apunta así a lograr que chicos que crecen en ámbitos de riesgo psicosocial tomen plena conciencia de su dignidad y descubran y desarrollen su potencial, de modo que alcancen una inserción sana e integral.